“Conocemos perfectamente lo que ofrece la competencia”, esta es una frase típica que escucho en mi día a día. Pero, ¿estamos seguros de que sabemos quién es nuestra competencia?
No sé si al PP o al PSOE se les pasaba por la cabeza la aparición de “Podemos”, pero estoy segura de que en su día a día estaban pendientes los unos de los otros y no pensaban que había “posibles amenazas” adicionales.
Ante la situación actual caracterizada por crisis económica, comoditización, déficit de atención del consumidor etc nos estamos enfrentando a un entorno donde por cuestiones de supervivencia cualquier agente es sujeto de entrar en nuestro mercado y ponerse a competir.
Y cuando digo, cualquiera, es cualquiera,.. como en la película de “Buscar al soldado Ryan” no vamos a saber de dónde vienen los tiros. Sectores muy asentados, van a ver temblar sus cimientos. Sin ir más allá, estos días leía noticias sobre la creación de cooperativas eléctricas y podía recordar mis conversaciones con directivos en el sector donde me aseguraban que en esta industria impera una sensación de: “aquí nunca pasa gran cosa”. No había necesidad de hacer llegar el mensaje emocional. Pues ya está empezando a pasar.
Auguro que en el 2015 aparecerán cada vez de forma más frecuente competidores no esperados, ni habituales. Incluso me atrevo a establecer distintos tipos:
Los que harán uso de su poder para crecer en otros mercados (ejemplo: Google, Amazon).
Operadores que tratarán de salir de la situación de sectores en guerra de precios de su actividad convencional (ejemplo: Call Centers convertidos en consultoras de customer experience, etc).
Agentes individuales que harán uso de las nuevas tecnologías para generar marcas personales compitiendo con productos tradicionales (ejemplo: Risto Mejide, Vegetta 777, etc)
Emocionar y FANScinar, serán una nueva forma de entender el mundo de las organizaciones y serán la llave del éxito del futuro.
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